La inflación de Estados Unidos cae al 5% ¿Es el fin de la pesadilla?
Según CNN, los precios de bienes y servicios en Estados Unidos se están moviendo en una dirección más “digerible” para los consumidores.
La inflación anual, medida por el Índice de Precios al Consumidor, cayó en marzo por noveno mes consecutivo. Y esta es la primera vez desde septiembre de 2020 que los precios de comestibles cayeron mes tras mes.
Los precios de los bienes y servicios han ascendido en un 5% para los últimos doce meses (hasta marzo de 2023), lo cual es menos que el 6% en febrero, según reportó la Oficina de Estadísticas del Empleo el miércoles. El índice de precios al consumidor anual cayó a su tasa más baja desde mayo de 2021, lo cual se ha visto beneficiado por las comparaciones interanuales para un periodo en el que los precios de los alimentos y la energía ascendieron notablemente debido a la invasión rusa a Ucrania.
Aún así, el Índice de Precios al Consumidor mostró una desaceleración sobre su medida mensual. El índice, que mide los cambios de precios durante un periodo de tiempo para una canasta de bienes, ascendió solamente en un 0.1% desde febrero, en comparación al incremento previo del 0.4%.
Los costos de la vivienda, los cuales tienden a reflejar datos atrasados, fueron los más grandes contribuyentes al ascenso del índice de precios sobre su base mensual, compensando los fuertes declives en categorías como la energía, según la Oficina de Estadísticas del Empleo.
El índice de precios en los alimentos cayó en un 0.3% para el mes, lo cual fue ayudado por los precios más bajos en los huevos (los cuales cayeron en un 11%) y las frutas y los vegetales (los cuales cayeron en un 1.3%). La categoría general de alimentos no mostró variaciones para el mes y se mantuvo en un 0% por primera vez desde noviembre de 2020.
Los economistas por su parte estaban esperando un incremento anual del 5.2% para el IPC y una ganancia mensual del 0.2%, según los datos de Refinitiv.
“Se trata de una buena noticia, pero no es el fin del juego, no es el fin de la historia”, dijo Erik Lundh, economista principal en Conference Board en conversación con CNN. “Hay mucho más por esperar – ojalá, tocando madera – y esperamos que nos estemos moviendo en la dirección correcta”.
Sin contar con los frecuentemente componentes volátiles de los alimentos y la energía, el IPC subyacente ascendió en un 0.4% para el mes, lo cual resultó en un crecimiento anual del 5.6. En febrero, el IPC subyacente se aceleró en un 0.5% mes tras mes y en un 5.5% para todo el año.
“Sobre la superficie, las presiones sobre los precios se están suavizando. Pero cuando la caja sea abierta (la inflación subyacente), esta se ha acelerado a su tasa más alta desde mayo de 2021”, dijo el economista Sung Won Sohn, presidente de SS Economics y profesor de Loyola Marymount University en una declaración. “Esto está muy por encima del 2% establecido como punto de referencia de objetivo por el banco central”.
El añadió: “Más alzas en las tasas de interés están por venir”.
El índice de precios al consumidor, o IPC, es uno de los principales puntos de análisis para determinar la inflación y es constantemente evaluado por la Reserva Federal, entidad que se encuentra luchando de manera agresiva para contener la inflación por medio de una dura política monetaria y fuertes alzas en las tasas de interés.
Consecuencias de los actuales desarrollos
El 1% de caída en el IPC principal es el movimiento a la baja más grande visto durante los últimos ocho años; sin embargo, este hito ha sido logrado principalmente debido a la fuerte alza de la inflación durante el año pasado.
“La inflación realmente comenzó a despegar durante la primavera pasada y a través de junio”, dijo Mark Zandi, economista jefe en Moody’s Analytics. “De manera que las cosas se van a sentir mucho mejor a partir de aquí y en los siguientes meses debido a estos efectos de base”.
Pero los tiempos han sido completamente atípicos durante los últimos tres años. De manera, que durante los meses que vienen, los movimientos promedio serán sumamente críticos al momento de ser observados, dijo Lundh.
Mientras que la imagen es mucho más clara para la trayectoria del IPC principal, es mucho más opaca para la actividad subyacente y “super-subyacente” (servicios básicos, excluyendo la vivienda y los arriendos), dijo Zandi.
Los efectos de base son mucho menos pronunciados para el IPC subyacente, porque el ascenso en la inflación de primavera y de verano fue impulsado por los alimentos, la energía y los precios de los bienes.
“La inflación subyacente está permaneciendo como mucho más persistente”, dijo Zandi. “Espero una mejoría realmente hacia la mitad y segunda mitad del año cundo los costos de los servicios de vivienda realmente empiecen a bajar”.
Los costos de la vivienda, como medida dentro del IPC, tienden a mostrarse mucho más rezagados que otras categorías en la medida en que la Oficina de Estadísticas del Empleo recoge los datos cada seis meses y la mayoría de los arrendamientos no cambian tan frecuentemente. Los datos del sector privado muestran que las rentas de los apartamentos han caído en los meses recientes, lo cual sugiere que una desaceleración eventual en los precios de los arriendos se mostrará pronto en el IPC.
Sin embargo, al quitar los precios de los arriendos, esto todavía deja una “inflación súper subyacente” que ya permanecido persistentemente alta.
“La inflación súper-subyacente se correlaciona con los salarios; por lo tanto, la Fed debería estar mirando a algo de alivio en esta métrica como un signo de ganancias más lentas en los salarios”, dijo Gary Pzegeo, director de renta fija en CIBC Private Wealth US. “El repote de hoy muestra que la inflación súper-subyacente se desaceleró en mazo, pero permanece como un componente fuerte de la inflación, llegando hasta el 4% anualizada durante los últimos tres y seis meses”.
“Esto también es un signo de que el mercado laboral permanece fuera de sus niveles tradicionales de alzas”.
Más alzas en las tasas de interés por parte de la Fed para el futuro
En el mes de marzo, la trayectoria del IPC no se movió demasiado por fuera de su actual curso, dijo Ludh.
“Hay algo de noticias buenas en los datos de la inflación de hoy, pero no creo que es suficiente para que la Fed haga una pausa en sus actuales alzas”, dijo él. “De manera que estamos esperando un alza de un cuarto de punto en la reunión de mayo e incluso potencialmente otra alza después de esa”.
La lucha de la Fed contra la inflación se volvió más compleja en marzo tras el colapso de dos bancos regionales de Estados Unidos, lo cual causó agitación en la industria financiera. La Fed, el Departamento del Tesoro y la Corporación de Aseguramiento de Depósitos se apresuraron a asegurar a los depositantes y a prevenir futuras corridas bancarias.
Sin embargo, hay expectativas de que la agitación podría significar condiciones más difíciles para el otorgamiento de créditos, lo cual podría enfriar la demanda e incluso ayudar a la Fed en sus objetivos de lucha contra la inflación. Aún así, esto podría crear más incertidumbre acerca de una posible recesión.
“El IPC parece estar desacelerándose y la Fed todavía tiene que considerar hasta dónde puede restringir el crédito”, dijo Gina Bolvin, presidente de Bolvin Wealth Management en una declaración.
Mientras que la inflación se ha moderado después de alcanzar su punto más alto en el pasado verano, el ritmo al que se mueve ahora es mucho más lento del anticipado en la medida en que un fuerte mercado laboral y un gasto resiliente de los consumidores ha continuado impulsando el crecimiento de la economía.
Con información de CNBC.